Nos gusta hablar de las prótesis de brazos, ya que suelen ser una reminiscencia para aquellas personas que han perdido una extremidad a su vida anterior, dando un paso más en su completa recuperación. Gusta escribir estas noticias, y sobre todo, gusta saber que esa persona puede volver a hacer vida normal.
El caso de hoy es el de JC Sheitan Tenet, un tatuador francés que perdió la parte inferior de su brazo hace 22 años. Cuando ocurrió la fatalidad, nunca imaginó que volvería utilizarlo para dibujar; pero hace sólo unas semanas, adquirió una prótesis que le permitió trabajar como máquina de tatuaje, gracias al trabajo de Jean-Louis González, un artista e ingeniero.
El propio tatuador dijo a través de Facebook que el brazo integra piezas de una máquina de escribir, de coser, de un tocadiscos y un manómetro, junto con el mecanismo principal que otorga al artista francés la posibilidad de volver a tatuar gracias a su rotación de 360º y con una ingeniería pensada para que el cableado no afecte al tatuaje. Todo aderezado con una estética ‘steampunk’ que, además de funcional, lo hace increíble de ver.
«Lo que comenzó como una escultura, ha terminado siendo algo funcional», afirma Tenet. «[Gonzal y yo] entendimos que no teníamos que recrear una prótesis de una mano, sólo tuvimos que crear una herramienta que mejorara a la mano».
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