Combustibles fósiles: ¿Cómo terminar con la dependencia de uso?
En la reciente COP28 de las Naciones Unidas, más de 200 países reconocieron la amenaza global de la dependencia de combustibles fósiles, destacando preocupaciones ambientales compartidas. Este histórico consenso subraya una conciencia general, a pesar de la reticencia de algunos líderes mundiales.
El uso de combustibles fósiles alcanzará el récord de utilización en 2025
Por primera vez en la historia, los representantes reunidos en Dubai, Emiratos Árabes, se comprometieron a buscar la forma de abandonar el empleo de carbón, petróleo y gas para frenar el cambio climático.
Hasta ese momento, se han establecido acuerdos que enfrentan desafíos en su implementación. Sin embargo, carecen de acciones claras para superar la dependencia.
Según Justin Rowlatt, el editor climático de la BBC, en los años próximos la humanidad llegará a superar el pico histórico de consumo de combustibles fósiles. Sin embargo, llegado a esos niveles de uso, el consumo comenzará a disminuir gradualmente y esto se puede aceptar como un logro que favorecerá al planeta.
La transición hacia un modelo energético limpio plantea incertidumbres sobre su rapidez. La pregunta crucial es si ocurrirá antes de que la capacidad del planeta se vea comprometida.
Según la Agencia Internacional de Energía (AIE), el uso de combustibles fósiles alcanzará su pico máximo para 2025. Fatih Birol, director ejecutivo de la AIE, dice que ese año se producirá un “punto de inflexión histórico”.
Vaclav Smil, un experto en energía y su impacto económico global, expresa, escepticismo sobre la rapidez mencionada. Él considera que la energía es el motor esencial de la economía mundial, asimismo afirma que sin energía no hay economía.
La solución: usar energías alternativas
La economía mundial mueve anualmente 4 mil millones de toneladas de cemento, mil millones de toneladas de acero y 4 mil millones de toneladas de combustibles fósiles. Esto determina, según Smil, que somos una sociedad dependiente de los combustibles fósiles.
Actualmente, la energía que utilizamos proviene en un 80% de los combustibles fósiles.
En la COP28, se acordó la reducción de las estadísticas ambientales. La eólica y solar, son fuentes alternativas con gran potencial que experimentaron notables avances. Sin embargo, representan solo el 12% de la energía utilizada en 2022.
Otro experto, Chris Stark, del Comité del Cambio Climático de Reino Unido, es más optimista. Opina que lo decidido en la COP28 llevará a electrificar todo, ya que los dispositivos eléctricos tienden a tener mayor eficiencia que los de combustible líquido. Cita como ejemplo a los automóviles eléctricos que no generan carbono ni calor debajo del capó.
Opina también que las energías renovables solo requieren una gran inversión para su instalación. Luego viene el ahorro, puesto que tanto el sol como el viento son gratuitos.