El número de transistores en un circuito integrado se duplica cada dos años
A esto se lo conoce como «Ley de Moore» en honor al hombre que lo pustuló, Gordon E. More (cofundador de Intel). Enunció la frase en 1965 y desde entonces se ha cumplido.
Del mismo modo que la progresión en el crecimiento de las bacterias del género Clostridium, esto se entiende mejor con un ejemplo. Y como ejemplo tomamos el Ford Mustang de 1965. Si la velocidad de los automóviles se duplicara cada dos años, en el año 2012 alcanzarían la vertiginosa cifra de 594.000 kilómetros por segundo, casi el doble de la velocidad de la luz. Mejor aún, en términos de rendimiento de combustible un automóvil podría recorrer con un consumo de un litro 101 millones de kilómetros.
Y al igual que ocurre con el caso de las bacterias, estas dos cosas no se cumplen. Una verdadera lástima, porque podríamos ahorrar mucho combustible. Pero hay que tener en cuenta que en el caso de los circuitos integrados la Ley de Moore lleva 47 años vigente.