Hay quienes prefieren los aviones por la velocidad. Hay quienes eligen trenes por el medioambiente. ¿Y un tren que viaje tan rápido como un avión, pero que sea ecológico? China ha presentado un nuevo prototipo de un tren tipo Maglev (transporte de levitación magnética). Es capaz de alcanzar una velocidad de hasta 620 kilómetros por hora. Es el tren tan rápido como un avión.
¿Aún más rápido?
Los investigadores de la Universidad de Jiaotong Suroeste lo presentaron. La velocidad máxima del tren es probablemente la más rápida de todos los vehículos que circulan en la tierra. Y sí, se acerca a la velocidad de algunos aviones, informan los medios locales. Sin embargo, los desarrolladores están trabajando para extenderla hasta los ¡800 kilómetros por hora!
China ya tiene el servicio comercial de levitación magnética más rápido del mundo: Shanghai Transrapid. Opera con una velocidad máxima de 430 kilómetros por hora y fue abierto en 2002. No obstante, el nuevo tren Maglev crearía conexiones aún más rápidas entre las ciudades chinas.
El nuevo proyecto se basará en la tecnología superconductora, señalan los desarrolladores. La superconductividad ocurre cuando la resistencia eléctrica se acerca a cero mientras se enfría hasta temperaturas muy bajas. El estado superconductor sería la clave para soportar vehículos Maglev más rápidos y eficientes, explican los especialistas.
El proyecto chino sería un rival serio para una línea de levitación magnética que se planea abrir en Japón entre Tokio y Nagoya en 2027. Pero los investigadores de Chengdu aseguran que su tecnología será mucho más económica. No usa helio como sus homólogos japoneses para conseguir las temperaturas bajas.
No muy cercano
«El helio líquido es muy caro. Aquí logramos la superconductividad a una temperatura ligeramente más alta mediante el uso de nitrógeno líquido. Eso reduce el costo a una quincuagésima parte», explica Deng Zigang. Es investigador del Laboratorio Estatal Clave de Potencia de Tracción en la Universidad de Jiaotong Suroeste.
El prototipo chino utiliza fibra de carbono y pesa aproximadamente la mitad del peso de sus homólogos de trenes de alta velocidad. El tren tan rápido como un avión no estará listo hasta dentro de unos años. Los investigadores admiten que todavía quedan problemas por resolver antes de que la nueva tecnología se vuelva comercialmente viable. Señalan que el proceso podría demorar unos seis años. Pero, como todos sabemos, el tiempo pasa volando… como un tren.
