El FS Sonne es un buque científico que navega los océanos de nuestro planeta. La investigación y la cartografía del fondo oceánico es una gran incógnita y preocupa a la ciencia. Pero el gran inconveniente es que es muy difícil llegar a los lechos marinos por la gran presión que hay en esas zonas. Por esta razón es que necesitan equipamiento muy avanzado. Las expediciones científicas hoy cuentan con el más avanzado de los buques de investigación oceanográfica: el FS Sonne (sol en alemán).
El FS Sonne es un buque científico alemán que navega los océanos del mundo
El buque comenzó a navegar en el 2014. Está diseñado especialmente para intervenir en trabajos científicos de investigación. Es una plataforma multipropósito que incluye casi todas las disciplinas marinas. Puede analizar los diferentes tipos de oceanografía. Así realiza investigación biológica y física, química marina o atmosférica. También tiene equipo para geología marina, geofísica marina y meteorológica, geodinámica además de biogeoquímica marina.
El buque es propiedad del gobierno alemán y como tal, porta su bandera. Trabaja principalmente en la investigación de los océanos Pacífico e Índico. En su popa, cuenta con una gran grúa que puede alzar hasta 30 toneladas. Su función principal es lanzar submarinos para la investigación y exploración de aguas profundas.
Un cabrestante ayuda a que la grúa baje equipos hasta los 12 mil metros de profundidad. En la misma cubierta, hay un taller para hacer trabajos pesados de mecánica. Incluye también, un laboratorio de electrónica, de mecánica de precisión y de electricidad.
Además, en la cubierta hay una estación meteorológica automatizada. Con ella pueden controlar y registrar la temperatura. Además, toman datos de dirección y velocidad del viento, la humedad, la presión del aire y la radiación ultravioleta.
Cuenta con el equipo más avanzado para realizar todo tipo de investigaciones en el medioambiente
Dispone de ecosondas de última generación y precisión, que permiten medir el lecho marino profundo. Así mismo, pueden hacer exámenes sísmicos. Finalmente, cuenta con un radar de olas y un pluviómetro. El buque Sonne es energéticamente eficiente y cuidadoso con los ecosistemas y el medioambiente.
En la actualidad está ejecutando trabajos en las costas de Chile, en el Pacífico. Frente a las costas chilenas la Placa Oceánica se desliza por debajo de la Placa Sudamericana. Esta falla geológica provoca sismos marinos y algunos son devastadores. Después de cada sismo puede ocurrir un tsunami que también destruye. Los científicos a bordo del Sonne están investigando tensiones tectónicas marinas en el fondo oceánico.
Estas tensiones tectónicas se desarrollan con el tiempo y pueden derivar en un terremoto. El suelo marino guarda información importante sobre cada terremoto. Los científicos lo estudian mediante el campo de la geodesia del fondo marino. Para ello utilizan el equipamiento de alta precisión que está en el barco.
El Sonne transporta 40 científicos y lleva una tripulación de 32 personas. Consta de 17 laboratorios de 600 metros cuadrados cada uno. Es tan eficiente y respetuoso con el medioambiente que recibió la etiqueta ecológica “Ángel Azul”.
