El dirigible moderno: Solar Airship One
Los seres humanos solemos, en algunas circunstancias, ser un poco melancólicos con el pasado. Sobre todo a la hora de conseguir sostenibilidad, para un planeta que lo reclama a gritos. Así, vemos la reaparición de las velas en los barcos y el diseño de un dirigible moderno en la aviación, entre otros. Con el nuevo zepelin, buscan corregir errores del pasado e implementar nuevas tecnologías y materiales para evitar accidentes como el del Hindenburg. Así nace el Solar Airship One.
Solar Airship One es el dirigible del siglo 21
La empresa Euro Airship está construyendo un dirigible moderno, el Solar Airship One. El diseño es de gran tamaño, sin embargo, no producirá gastos en combustible. Sus potentes motores usarán energía solar e hidrógeno. Esto les permitirá circunnavegar el mundo sin reabastecerse. El proyecto es realizar un vuelo de 40 mil kilómetros a través del Ecuador y para ello no harán ninguna escala, ni utilizarán combustibles fósiles. Con ello lograrán la gran ventaja de generar contaminación cero.
El dirigible volará a 6.000 metros de altura y atravesará en su recorrido 25 países. Para su construcción, desarrollaron durante 10 años la planificación e investigación. Implementaron muchísimas innovaciones para subsanar que la construcción de dirigibles se desechó hace 90 años, con el desastre del Hindenburg.
Diseño y construcción del dirigible moderno
Precisamente, los ingenieros de Airship estudiaron a fondo todos los dirigibles que aparecieron después de la explosión del alemán. Partiendo de esos resultados, eligieron una estructura rígida, que le ofrece versatilidad en cuanto a transporte de pasajeros, carga o para usos militares.
El dirigible, que probablemente volará en 2026, mide 151 metros de largo, con un volumen de expansión de helio de 53.000 metros cúbicos. Tendrá en su cubierta exterior, 4.800 metros cuadrados de paneles solares que generan la energía para sus motores y la electricidad a bordo.
Su funcionamiento es simple. Durante las horas diurnas funcionará con la energía solar que recibe a través de los 4.800 m² de paneles solares. Durante la noche, los excedentes de la energía, almacenados en baterías, producirán hidrógeno a través de la electrólisis del agua.
La estructura del Solar Airship One es muy robusta para enfrentar las presiones externas y poder regular la temperatura interior. Para ello, cuenta con una doble envoltura reforzada. La nave podrá enfrentar las más difíciles condiciones meteorológicas sin problemas. Una ventaja que tiene sobre los aviones convencionales, es que estos no pueden aterrizar, ni levantar vuelo en climas adversos.
Para almacenar el helio, el Solar Airship One cuenta con 15 compartimientos separados para el gas, que se gestionan individualmente. Esto permite que su maniobrabilidad sea excelente y no requiera infraestructuras especiales en tierra para maniobrar.
Para la travesía de 20 días alrededor del mundo, la empresa tiene designados a tres experimentados pilotos. Bertrand Piccard, piloto del avión solar que dio la vuelta al mundo. Dorine Bourneton la primera mujer piloto acrobática del mundo. Y Michel Tognini, un veterano astronauta de la ESA.