¿Cómo funcionan los audífonos para sordos y qué tipos hay?
Cada vez son más las personas que necesitan un poco de ayuda para poder escuchar correctamente. Aquí es donde entran en juego los audífonos, los cuales se están volviendo en una herramienta fundamental de nuestro día a día.
¿Qué es un audífono?
Un audífono es un pequeño aparato que se pone en el oído para mejorar la audición de la persona que sufre pérdida auditiva. Esa pérdida puede venir dada por diferentes motivos, lo importante es dejar claro que mejora la calidad de la audición y en consecuencia la calidad de vida.
Gracias a la evolución de la tecnología y de los audífonos, en la actualidad podemos decir que hay audífonos para cada persona. Eso permite que cada persona pueda tener su propio audífono y configurarlo según sus necesidades para poder obtener unos buenos resultados.
¿Cómo funcionan los audífonos para sordos?
Para dar respuesta a esta pregunta nos hemos puesto en contacto con uno de los expertos de los centros auditivos de Gáldar de Audifono.es. El experto nos ha comentado en primer lugar que no hay que confundir amplificadores de sonido con audífonos. Como nos ha indicado, sobre el papel pueden parecer iguales, pero realmente no lo son. El audífono compensa la deficiencia auditiva, mientras que el amplificador de sonido busca ampliar los sonidos.
Comentado ese detalle pasamos a ver cómo funcionan los audífonos para sordos y así sacarles el máximo partido. Para comenzar, es vital que cuando comencemos a notar una deficiencia auditiva acudamos a un centro auditivo para que nos hagan un test de audición. No hay que esperar a que el problema vaya a más, sino que hay que ponerle solución en el menor periodo de tiempo posible.
El audífono tiene un funcionamiento sencillo para el usuario, aunque el trabajo es más complejo para el propio aparato. De manera resumida podemos decir que el audífono recibe el sonido a través del micrófono. Tras recibir la información a través de ondas, el audífono transforma esas ondas en señales eléctricas las cuales pasan al amplificador. Dentro del amplificador se aumenta la potencia de la señal y se manda a través de la canalización al oído a través del auricular.
Para que podamos comprender más a fondo el funcionamiento de los audífonos te vamos a mostrar los diferentes componentes básicos:
- Micrófono: es el apartado encargado de captar el sonido del ambiente. Una vez que se recibe la señal acústica es el momento de convertirla en señal eléctrica para poderla procesar por el resto del audífono.
- Amplificador: es la parte del audífono que se encarga de procesar y posteriormente amplificar la señal recibida del micrófono. Posteriormente la manda al auricular para que la persona que lo lleva puesto pueda escuchar lo que hay a su alrededor.
- Batería: es la parte del audífono que proporciona energía al aparato para que pueda funcionar. En la actualidad hay diferentes tipos de pilas a la hora de proporcionarle energía, pero las pilas recargables son las que más éxito están teniendo. Se cargan por la noche y ofrecen una autonomía durante todo el día.
- Auricular: es la parte encargada de recibir la señal eléctrica que ha sido procesada anteriormente. Una vez recibida, se amplifica según las necesidades de la persona que lleva el audífono y se transmite la información. Eso hace que la persona pueda escuchar cosas que de otra manera le serían imposible de escuchar.
- Control de volumen: no todos los modelos incluyen extra, pero la gran mayoría de audífonos modernos sí que incluyen este extra. El objetivo del control de volumen es permitir a la persona regular el volumen de sonido para escuchar o no escuchar las cosas. Ese control se puede realizar a través de un pulsador o rueda de control. Aunque los modelos más modernos también permiten la opción de controlar el sonido a través de un control remoto.
Principales tipos de audífonos para sordos
Como podemos leer en este post de Regalos Hoy, en la actualidad hay diferentes tipos de audífonos entre los que podemos elegir. Dependiendo de cuales sean las necesidades se debe elegir entre una opción u otra. Aunque si se acude a un centro auditivo, los expertos rápidamente nos indicarán cual es el más adecuado.
- Audífonos invisibles: esta variedad de audífonos también recibe el nombre de intrauriculares. Destacan por usar tecnología digital para que la persona pueda escuchar lo que pasa a su alrededor sin problemas. Se elaboran a medida, lo que significa que cada persona puede disfrutar del audífono que realmente se adapta a sus necesidades. No solo ofrecen una buena audición, también una buena comodidad y pasan desapercibidos para el resto de las personas.
- Audífonos retroauriculares: en muchos sitios también se les conoce bajo el nombre de BTE. Se fabrican por una funda de plástico y se ponen dentro de la oreja. El sonido se transmite a través de un tubo de plástico hacia el oído. Se presenta como una buena opción para las personas que tienen problemas graves de audición, gracias a su gran potencial de ampliación del sonido.
- Audífonos en canal: también conocidos como audífonos RIC. Son muy discretos, por lo que suelen ser usados por personas que quieren que los demás no se fijen en la discapacidad. Son una buena opción para las personas que tienen una pérdida de audición media o baja. Eso se debe a que su capacidad de ampliación está bastante limitada por su pequeño tamaño.
- Audífonos pediátricos: como nos indican los expertos, es una variedad de audífonos que se desarrolla especialmente pensando en los niños. Se adaptan muy bien a las necesidades de los niños. No solo son cómodos, también ofrecen un buen agarre y lo más importante, se ven poco. Eso hace que el niño lo lleve sin miedo y pueda escuchar a los otros niños y adultos sin problemas.
Recuerda, lo importante es ponerse en manos de profesionales lo antes posible para tener la garantía de que escuchamos bien. No esperes a que sea demasiado tarde o la pérdida de audición irá a más.