La eficiencia energética es un desafío clave y China avanza en esta área con la construcción de un nuevo centro de cómputos de datos submarino. Este innovador proyecto tendrá la capacidad de 6 millones de PC’s.
El fondo del océano es donde estará el nuevo centro de datos chino
Sin lugar a dudas, la tecnología china siempre está a la vanguardia. Una vez más, con su nueva construcción, confirma que sigue siendo pionera en este campo. En las últimas décadas, la imagen pública de China cambió drásticamente. Antes, era sinónimo de manufactura barata. Hoy, es una potencia mundial que lidera en varios sectores tecnológicos. Incluso, especialistas en el tema creen que pronto la potencia asiática encabezará el desarrollo de la Inteligencia Artificial.
Últimamente, importantes empresas, como Meta, trasladan sus centros de cómputos a lugares con temperaturas más bajas, como por ejemplo Suecia. China, apuesta al fondo del mar para instalar su nuevo y poderoso centro de cómputos. La gran ventaja es que la refrigeración natural del mar disminuirá significativamente el consumo energético en comparación con los métodos tradicionales.
Características de la infraestructura
Está en funcionamiento desde marzo de 2023 sin presentar inconvenientes. Se encuentra en el condado autónomo Li de Lingshui en la provincia de Hainan.
El primer centro de datos submarino comercial conecta sus módulos a una estación costera mediante cables marítimos. Este lugar alberga los equipos de distribución de energía. También se encuentran allí las redes y los sistemas de monitoreo.
El personal supervisa los módulos con un sistema de monitoreo submarino. En el centro del sistema están los módulos de datos, que son cilindros de 1.300 toneladas cada uno, lo que equivale al peso de 1.000 automóviles. Tienen una vida útil es de 25 años.
La estructura contará con 100 cabinas, cada una con varias unidades de cómputo. Al estar ubicado en el fondo del mar, el centro de datos utiliza el agua marina para enfriar los módulos de manera natural. Esto reduce el consumo de energía, agua y espacio terrestre. Además, ofrece mayor densidad de potencia de cómputo, mejor seguridad y menor latencia en la red. A su vez, al operar sin polvo ni oxígeno, su durabilidad también se incrementará.
La empresa china afirma que su centro de datos submarino funciona comercialmente. No es un experimento, sino que, a pesar de continuar en construcción, ya presta servicio a sus clientes. La potencia de oriente es pionera en la utilización de espacios submarinos para centros de datos eficientes y ecológicos.
Estos centros reducen significativamente el impacto ambiental comparado con los centros en tierra de características similares. Si este proyecto se confirma como exitoso a largo plazo, podría marcar el inicio de una serie de centros de datos submarinos, optimizando energía y recursos naturales marinos.
