Las cajas negras que se utilizan en los aviones son dispositivos muy importantes para la aviación. Su principal función es registrar los datos y conversaciones realizadas durante un vuelo. Se utilizan, principalmente, para esclarecer incidentes aéreos.
Propósito de la caja negra
El primer prototipo de caja negra la diseñó en 1939 el ingeniero francés François Hussenot. Era rudimentaria y utilizaba film fotográfico calibrado con espejos. Los sensores a bordo emitían flashes en el film para registrar el historial del vuelo.
El dispositivo sirve para investigar accidentes e incidentes aéreos. Almacena información vital sobre el vuelo, permitiendo a los investigadores reconstruir los hechos. Gracias a ella, se pueden identificar fallos y mejorar las normas de seguridad.
Resiste condiciones extremas y consta de dos dispositivos esenciales; el registrador de datos de vuelo y el de voz en cabina.
FDR – Registrador de datos de vuelo
El FDR recopila parámetros técnicos del avión, como altitud, velocidad y rumbo. También monitorea el rendimiento de los sistemas y motores, brindando una imagen detallada del estado del avión antes y durante el incidente.
CVR – Registrador de voz en cabina
El CVR graba las conversaciones entre los pilotos y las que realizan con el control de tráfico aéreo. También captura sonidos del cockpit, como alarmas y comunicaciones, proporcionando contexto sobre las decisiones y acciones de la tripulación.
Características, diseño y durabilidad
A pesar de su nombre, la caja negra no es negra ni tiene forma de caja. Puede ser cilíndrica o esférica. Están pintadas de color naranja para facilitar su localización entre los restos de un accidente. Este color, conocido como naranja internacional, se utiliza en la industria aeroespacial para destacar objetos en su entorno. Por ejemplo, también se usa en los trajes de los astronautas de la NASA.
Están diseñadas y construidas para resistir condiciones extremas, con materiales altamente resistentes, capaces de soportar impactos violentos, altas temperaturas y profundidades submarinas. Esto garantiza la recuperación de datos incluso en los accidentes más severos.
Generalmente, están instaladas estratégicamente en la cola del avión. Esta ubicación aumenta las probabilidades de supervivencia en un accidente, ya que es la parte menos afectada durante los impactos.
Evolucionaron notablemente desde su creación. Los avances recientes incluyen la grabación de datos de imagen, capturando información de las pantallas y otros sistemas visuales de la cabina.
¿Y cuál es el proceso para recuperar la información grabada?
Después de un accidente, la prioridad es recuperar las cajas negras. Equipos de búsqueda utilizan tecnologías avanzadas para localizarlas, incluso las pueden ubicar bajo el agua. Algunos aviones ahora cuentan con cajas negras que se despliegan automáticamente. En caso de un accidente sobre el agua, estas cajas se separan del avión y flotan, facilitando su localización. Una vez recuperadas, los datos se analizan en laboratorios especializados.
Impacto en la seguridad aérea
Las cajas negras revolucionaron la investigación de accidentes aéreos. Gracias a ellas, se pudieron implementar mejoras significativas en la aviación. Las regulaciones de seguridad se actualizan continuamente en base a los hallazgos derivados de estos dispositivos.
Es un componente indispensable en la aviación moderna. Su capacidad para registrar datos y voces en cabina proporciona información esencial en la investigación de accidentes, por lo que contribuye significativamente a la seguridad aérea global. Gracias a ella, cada vuelo es más seguro.
