Esto ocurrió en Moscú hace dos años, en el Año Nuevo entre 2010 y 2011. Supuestamente la terrorista pretendía detonar un artefacto explosivo en la Plaza Roja de Moscú, donde podría haber matado a numerosas personas. Por suerte, fue lo suficientemente descudiada como para no tener apagado el teléfono móvil que detonaría los explosivos, que recibió un SMS publicitario y provocó una explosión prematura que mató a la terrorista.
La mujer procedía de la región de Dagestán, perteneiente a Rusia y de población mayoritariamente musulmana, por lo que se sospecha que el atentado fallido podría guardar relación con el de Domodédovo, el aeropuerto de Moscú, en el cual murieron 35 personas y 100 resultaron heridas y que ocurrió el día 24 de enero del año 2011.
