Seattle, la primera ciudad donde está penalizado tirar comida a la basura.
Seattle se convertirá, a partir de julio, en la primera ciudad en la que se multe a los ciudadanos que tiren comida a la basura. En esta ciudad del noroeste de Estados Unidos se han empezado a fiscalizar los contenedores de los ciudadanos para ver a quién se le ha ocurrido tirar restos orgánicos al cubo para, de esta manera, sancionar a los hogares en cuyos contenedores se hallen este tipo de residuos. Según una encuesta del Ayuntamiento, el 74% de los vecinos de Seattle apoyan la medida, mientras que un 11% se oponen a ella.
La ordenanza es aplicable tanto a comercios como a particulares y, aunque está en vigor desde enero, tan solo implica, por el momento, una política de aviso: los cubos que son sorprendidos con desechos orgánicos son señalados con una pegatina roja. Será a partir de julio cuando los habitantes de Seattle se enfrenten a multas de entre uno (para particulares) y 50 dólares (para establecimientos y edificios de vecinos) por tirar comestibles.
«Seattle es una ciudad líder en reciclaje. La mayoría de nuestros vecinos y negocios ya realizan su propio compostaje y este requerimiento supone una progresión en nuestro esfuerzo colectivo para que la ciudad sea cada vez más verde», señalaba Tim Croll, director de residuos sólidos del departamento de Servicios Públicos de la ciudad. Con el plan estiman que, en esta ciudad de 650.000 habitantes, la meta de un 65 % de basura reciclada se alcanzará antes de finalizar el 2015.