¿Se recuerdan los héroes anónimos como Neerja Bhanot?
Existen héroes que la historia les rinde homenaje cada año. Aunque también hay héroes anónimos, cuya valentía permitió salvar muchas vidas. Es el caso de Neerja Bhanot, una heroína, que por circunstancias desafortunadas tuvo que mostrar su valentía, aún a costa de su propia vida.
Historia de una auxiliar de a bordo que fue uno más de tantos héroes anónimos
Neerja Bhanot era una auxiliar de a bordo de una aerolínea. Durante el secuestro del vuelo 73 de esa empresa, salvó muchas vidas hasta que fue descubierta y perdió su vida. Salvó a muchas personas durante ese hecho.
Son muchos los requisitos para ser una sobrecargo, una determinada altura, dominio de idiomas y una cultura acorde. Aunque además, el cuidado y la seguridad del pasajero están en sus manos. Fueron muchas las tripulaciones que salvaron vidas en accidentes aéreos gracias a la templanza de quienes van a bordo.
El 7 de septiembre de 1963 Neerja llegó al mundo en la India en el seno de una familia de clase media. En 1985 contrae matrimonio como es costumbre allí, concertado por sus padres. Pero la pareja fracasa y Neerja regresa a vivir con sus padres a Bombay.
Luego de probar en el mundo del modelaje, aplica para trabajar de sobrecargo en una empresa aérea. En ese momento, era una de las aerolíneas más prestigiosas e importantes del mundo. Luego de unas semanas de entrenamiento en Miami, Neerja sube a su primer avión como auxiliar de a bordo.
Neerja Bhanot fue una auxiliar de a bordo muy especial
Fue el 5 de septiembre de 1985 cuando debía volar desde Bombay a Nueva York. El avión era un Boeing 747 Jumbo, llamado Clipper Empress of the Seas. El vuelo tenía el número 73 y debía hacer dos escalas, en Karachi, Pakistán y en Frankfurt, Alemania.
Hasta la primera de las escalas en Karachi, todo se desarrolló con normalidad. Los 19 tripulantes, incluida Neerja, y los 360 pasajeros se disponían para el vuelo. Sin embargo, se acercó al avión una furgoneta con 4 personas que subieron a bordo a bordo del avión.
Los 4 secuestradores fueron vistos por Neerja que avisó a sus compañeros y superiores sobre los terroristas. Fue ella misma que se ofreció de interlocutora entre la tripulación y los vándalos.
Un hecho delictivo que escribió otra historia
Lo primero que exigieron los secuestradores fue el pasaporte de todos los pasajeros, para identificar a los estadounidenses. Neerja se encargó de recogerlos, pero escondió entre los asientos y la basura los de origen americano (unos 43 pasaportes).
Cuando se hizo de noche, después de algunas detonaciones terroristas para causar temor, Neerja toma la iniciativa. Cuando el secuestro ya llevaba 16 horas, logró abrir una de las puertas del Jumbo, pero el tobogán no se desplegó. Por esto, procedió a abrir otra de las puertas con éxito.
Mientras los pasajeros evacuaban el avión, los terroristas disparaban contra ellos. Neerja trató de proteger a tres niños de las balas, pero una de ellas la alcanzó fatalmente. A solo un día de cumplir años, Neerja se convirtió en la heroína de ese vuelo.
En 2016 por ser parte de la lista de héroes anónimos, le rindieron un homenaje mediante una película que cuenta su historia. Sin embargo, como en muchos otros casos, pocos se acuerdan de su increíble valentía.
El saldo escalofriante del secuestro de esa aeronave fue de 21 muertos y 120 heridos. Sin las valientes acciones de esta sobrecargo, es posible que el desenlace hubiese sido mucho más grave.