Es una pena que en los tiempos en los que estamos aun sigan ocurriendo sucesos como este, pero por desgracia sigue pasando.
En las zonas más rurales de este lugar, la brujería es la causa de los hechos que no tienen explicación.
Kepari Leniata de 20 años y madre de un niño ha sido acusada de brujería por la familia de un niño de 6 años que murió en un hospital un día antes.
La mujer fue torturada con una vara de hierro rociada en gasolina y posteriormente quemada viva.
La policía informa de que más de 50 personas son sospechosos de haberle puesto una mano encima a la víctima y de haber cometido el delito.
