¿Es posible que todo empiece de nuevo? Esperemos que no. Esta vez no será culpa de los murciélagos. El nuevo coronavirus en roedores se esparce en Suecia estos días. Aparece en ratas, ratones y topillos. Estos también pueden ser portadores de virus que a veces son capaces de saltar a nuestra propia especie.
Nuevo virus
Las alarmas comienzan a sonar en Suecia por un nuevo coronavirus. Entre los topillos rojos, los investigadores han identificado un coronavirus. Lo bautizaron como el virus Grimso.
Por el momento, no se sabe si el virus recién encontrado es de alguna manera peligroso para los seres humanos. Por ahora, los hallazgos están publicados en Viruses. Son un buen recordatorio de por qué necesitamos monitorear los virus de la vida silvestre. Especialmente los transportados por animales que viven muy cerca de nosotros.
«Todavía no sabemos qué amenazas potenciales puede representar el virus Grimso para la salud pública. Realizamos observaciones a los coronavirus anteriores identificados entre los topillos. Hay buenas razones para continuar monitoreando el coronavirus entre los roedores salvajes». Lo indica el virólogo Ake Lundkvist de la Universidad de Uppsala en Suecia.
Hábitats destruidos
En los últimos años, hay una tendencia clara. Es un aumento dramático de las enfermedades infecciosas que pueden estar relacionadas con pequeños mamíferos, como los roedores. La investigación en torno a la ecología de estos animales hospedantes es vital. Se podrían prevenir futuros brotes.
Estos animales buscan refugio de condiciones climáticas adversas. Se instalan en viviendas y esto aumenta el riesgo de que contraigamos una enfermedad, advierte Science Alert.
Otros estudios advierten de la explotación humana de los espacios salvajes. Aumenta directamente el riesgo de que las enfermedades animales se extiendan a los seres humanos. El nuevo coronavirus en roedores puede propagarse por esa causa. La destrucción de hábitat naturales de distintas especies es fatal. Puede conducir a que nuevos coronavirus se instalen directamente en nuestros hogares.
