Muchos padres se alarman cuando ven a su hijo pequeño masturbándose y se preocupan al no entender esta conducta. El hecho de que los niños se toquen es algo totalmente normal y forma parte de la evolución del niño, están explorando su cuerpo. 
«El pene y la vulva de los niños tienen sensibilidad y son capaces de producir sensaciones agradables desde que somos muy pequeños”, asegura Patricia Huelves, psicóloga y sexóloga en la Federación de Planificación Familiar Estatal (FPFE). “No es ni bueno ni malo, es una consecuencia del desarrollo”, añade.
Realmente los padres se preocupan porque tendemos a entender esta masturbación como la realizada en la etapa adulta sin embargo, es más bien una estimulación como consecuencia de la curiosidad de conocer su propio cuerpo. «Es fundamental no ver con ojos de adulto las conductas de los niños. No interpretar su intencionalidad más allá de la curiosidad y el placer que supone», indica Inés Hernández Isman, sexóloga y psicóloga del centro AGS- PsicólogosMadrid.com.
Para aclarar cualquier duda ante este comportamiento los expertos recomiendan enseñar a los niños cuando pueden hacerlo y cuando no pero nunca regañándoles ni prohibiéndolo pues lo entenderán como un reto y lo harán más a menudo; en el caso de que tengan dudas siempre es aconsejable acudir a expertos, y los padres no deben tener miedo a la educación sexual siempre adecuada a cada momento y edad.
