Todo el mundo alguna vez ha sentido esa sensación de malestar general tras un consumo excesivo de bebidas alcohólicas, la llamada resaca.
Las causas que producen la resaca no es otra que las sustancias residuales, llamadas congéneres, que se generan en el proceso de la obtención del alcohol. Al descomponerse, producen sustancias ponzoñosas, tóxicas o venenosas que son las responsables de los síntomas de ese malestar.
Ahora bien, los congéneres están en mayor proporción en las bebidas alcohólicas o espirituosas menos destiladas y de color más oscuro, en especial, las de naturaleza vínica y los whiskies. En definitiva, las bebidas que más resaca dan, por orden, son: coñac, vinos tintos, ron, whisky, vino blanco, ginebra y vodka.
Además de los congéneres, otro punto importante es el azúcar. Las bebidas con menos azúcares y más cantidad de alcohol puro producen menos resaca. El mejor ejemplo es el vodka. Mientas más se destila una bebida con menos cantidad de azúcares, más pura será.
Asimismo, la resaca afecta más a las mujeres que a los hombres porque el hígado de los hombres procesa y descompone con más rapidez el alcohol y los congéneres.
