La sensación de hambre nos vuelve más agresivos
Aléjate de tu pareja, tus amigos o tus familiares cuando tienes hambre. O así lo advierte las Universidades de Ohio y Amsterdam. Según un estudio realizado por ambas, la sensación de hambre nos vuelve más agresivos.
La clave está en mantener la distancia con los que te rodean cuando eso sucede. EL estómago vacío nos incita a enzarzarnos en discusiones, algo que puede debilitar inútilmente nuestra relación de pareja o amistad.
Lo mismo ocurre cuando seguimos una dieta estricta, ya que el bajo nivel de azúcar del que disfruta la sangre hace que seamos agresivos y que las discusiones sean muy fuertes.
En el estudio participaron 107 matrimonios, que durante tres semanas se sometieron a varios análisis para conocer su nivel de glucosa. Quedó al descubierto entonces que aquellos que presentaban un nivel bajo de azúcar también presentaban un comportamiento más irascible.