Películas de catástrofes, pandemias, calentamiento global… ¿se predice el fin del mundo? Si es así, no es un hecho imposible. Es más, para algunos científicos, ya tenemos una fecha de caducidad. Es lo que dice un estudio publicado en «Scientific Reports». Pronostica que la civilización colapsará en cuarenta años. Así que aprovecha tu tiempo actual: cuarenta años se pasan volando.
El estudio se enfoca en modelos matemáticos. Apuntan como causa la deforestación y la destrucción de los bosques del planeta. «Nuestros cálculos lo muestran. Con la actual tasa de crecimiento de población y de consumo de recursos, colapsaremos en pocas décadas». A esto afecta, en particular, el consumo de bosques. La frase es de Mauro Bologna y Gerardo Aquino, los científicos autores del estudio.
Recuerdan que antes de la aparición de la civilización, la Tierra estaba cubierta por 60 millones de kilómetros cuadrados de bosques. Ahora esa cifra es de menos de 40. La deforestación ocurrida entre los años 2000 y 2012 muestra que, cada año, se deforestan 200.000 kilómetros cuadrados de bosque. Así, las masas forestales desaparecerían en un plazo de entre 100 y 200 años.
Estas cifras apenas dejan lugar para un escenario favorable. «Un colapso catastrófico es el escenario más probable. Nos basamos en la evolución dinámica de los parámetros actuales. La probabilidad de que nuestra civilización sobreviva es menos del 10%». Esto se traducirá en una caída drástica de la población.
El artículo tiene una gran limitación. Asume que la tasa de crecimiento de población y deforestación serán constantes en los próximos años. Señalan que es difícil imaginar grandes cambios en estos parámetros.
Pero otros datos nos brindan esperanza. Sí, la pérdida de bosques se aceleró en un 2,8% en 2019, según Global Forest Watch. Pero la pérdida de bosques bajó de 7,8 millones de hectáreas anuales a 4,7, según datos de FAO. La reforestación propició este cambio.
Los bosques permiten el almacenamiento de carbono, la producción de oxígeno, y la regulación del ciclo del agua. Dan soporte a los sistemas de alimentos naturales y humanos. Y limpian la atmósfera proporcionando cobijo a incontables especies. Es muy improbable imaginar la supervivencia en una Tierra sin bosques».
Por ese motivo, se han centrado en modelizar las consecuencias que puede tener la deforestación indiscriminada. A través de herramientas estadísticas, trazan modelos matemáticos. La civilización colapsará en cuarenta años de acuerdo a estos modelos. ¿Qué haremos entonces? ¿Huir a otros planetas? ¿Construir una mega base espacial? No hay tiempo para esos planes.
Sin embargo, hay decisiones que sí podemos tomar y que pueden favorecer un cambio. No solo los líderes mundiales pueden impulsar estas pequeñas acciones, sino nosotros también, los ciudadanos del mundo.
