La ciudad de los rascacielos de adobe
La “Manhattan del desierto”
Está en el corazón de la región de Hadramaut, en Yemen. Allí es donde se eleva la ciudad de los rascacielos de adobe. Una ciudad de casi 500 años. Y un ejemplo de la capacidad de adaptación de los humanos a los entornos más extremos. Es también llamada la “Manhattan del desierto”.
Mucho antes de Nueva York
Es la ciudad amurallada de Shibam. Sigue siendo la metrópolis más antigua del mundo en emplear construcción vertical. En su día fue una importante parada de caravanas en la ruta de las especias y el incienso que atraviesa la península arábiga. En la década de 1930, la exploradora británica Freya Stark la apodó «Manhattan del desierto».
Todos los aspectos del diseño de Shibam son estratégicos. Se encuentra ubicada sobre un promontorio rocoso. Está rodeada por un enorme wadi («valle» en árabe) de inundación. Su posición elevada la protege de la crecida de las aguas. Y mantiene la proximidad a su principal fuente de agua y agricultura. La ciudad se construyó conforme a un patrón rectangular tras los muros fortificados, un método defensivo que protegía a sus habitantes de las tribus rivales. Les brinda una posición estratégica para avistar a los enemigos que se acercasen.
Ciudad con trucos
Los edificios de ladrillos de adobe llegan a extenderse hasta los siete pisos de altura. Se construyeron sobre el suelo fértil que rodea la ciudad. Una mezcla de tierra, heno y agua se moldeaba para formar ladrillos y se dejaba cocer al sol durante días. Los bajos sin ventanas se destinaban a ganado y al almacenamiento de grano. Y los niveles superiores normalmente se utilizaban como pisos comunales para socializar.
Los puentes y las puertas que conectan los edificios eran un medio rápido de huida. Es otra de las impresionantes características de defensa de la ciudad. La ciudad sufre la amenaza del viento, la lluvia y la erosión por calor. En 2008, un ciclón tropical provocó inundaciones en Shibam, dañando varias construcciones.
Pero la ciudad también se encuentra amenazada por acciones humanas. En 2015, Shibam se incluyó en la lista de Patrimonio Mundial en Peligro, junto a otros dos lugares de Yemen. Había estallado una violenta guerra civil que empujó al país a una catástrofe humanitaria. Los edificios históricos sufrieron daños importantes durante los intensos bombardeos de Sana’a. Y siguen en peligro debido al conflicto armado.
Protegiendo el pasado
«Estos ataques están destruyendo el singular patrimonio cultural de Yemen. Es un archivo de la identidad, la historia y la memoria de los pueblos, así como un testimonio excepcional de los logros de la civilización islámica». Lo declaró en un comunicado de prensa la directora general de la UNESCO, Irina Bokova.
La ciudad de los rascacielos de adobe no es el primer lugar de patrimonio cultural bajo amenaza. En 1954, La Haya adoptó la Convención de la UNESCO para la Protección de los Bienes Culturales en caso de Conflicto Armado tras la extensa destrucción de propiedad cultural durante la Segunda Guerra Mundial. Es el primer tratado internacional de este tipo. La convención opera bajo una premisa: «Los daños ocasionados a los bienes culturales pertenecientes a cualquier pueblo constituyen un menoscabo al patrimonio cultural de toda la humanidad». Por ello garantiza su protección por parte de la comunidad internacional.