Hasta el nombramiento de Francisco I, el último Papa nacido fuera de Europa fue Gregorio III, elegido en el 731
Gregorio III fue el papa número 90 de la Iglesia y el último, hasta el nombramiento del argentino Francisco I, en nacer fuera del continente europeo. Nacido en Siria, su papado destacó por su lucha contra los lombardos y la iconoclasia en el Imperio Bizantino, llegando a excomulgar al emperador León III. Prohibió el consumo de carne de caballo debido a que, según él, era una abominación relacionada con un ritual pagano.
Murió sin poder hallar una solución al conflicto lombardo en el año 741. Su sucesor fue el papa Zacarías.