El verano más caliente desde 1880
Lo dice el Instituto Goddard de Estudios Espaciales (GISS) de la NASA. Se vive el verano más caliente desde 1880. Los meses de junio, julio y agosto fueron 0,23 grados Celsius más cálidos que cualquier otro registrado por la NASA. Solo agosto fue 1,2 C más cálido que el promedio. De junio a agosto se considera verano meteorológico en el hemisferio norte.
Este nuevo récord se produce cuando un calor excepcional azotó gran parte del mundo. Exacerba incendios forestales mortales en Canadá y Hawaii. Genera olas de calor abrasadoras en América del Sur, Japón, Europa y Estados Unidos. Contribuyó a lluvias intensas en Italia, Grecia y Europa Central.
Factores combinados
El análisis calcula anomalías de temperatura en lugar de la temperatura absoluta. Una anomalía de temperatura muestra cuánto se ha alejado la temperatura del promedio base de 1951 a 1980. «Las temperaturas altas de la superficie del mar, alimentadas por El Niño, son responsables del calor récord del verano». Lo dijo en un comunicado Josh Willis, oceanógrafo del Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA. El Niño es un fenómeno climático natural caracterizado por temperaturas superficiales del mar más cálidas de lo normal.
El verano más caliente desde 1880 es un verdadero récord. Y continúa una tendencia de calentamiento a largo plazo. Las emisiones de gases de efecto invernadero causadas por el ser humano agravan la crisis. Al mismo tiempo, los fenómenos naturales de El Niño en el Pacífico bombean calor adicional a la atmósfera global.
“Las olas de calor que experimentamos ahora son más largas, más calientes y más duras. La atmósfera también puede contener más agua ahora. Y cuando hace calor y humedad, al cuerpo humano le resulta aún más difícil regular su temperatura».
Efecto de El Niño
Willis y otros científicos esperan ver los mayores impactos de El Niño en febrero, marzo y abril de 2024. El Niño está asociado con el debilitamiento de los vientos alisios del este. Influye el movimiento de agua cálida desde el Pacífico occidental hacia la costa occidental de las Américas. El fenómeno puede tener efectos generalizados. Trae a menudo condiciones más frías y húmedas al suroeste de Estados Unidos y sequías en países del Pacífico occidental, como Indonesia y Australia.