El año pasado murió el último soldado que luchó en la Primera Guerra Mundial a los 110 años, también participó en la Segunda
Claude Stanley Choules era el único superviviente de un conflicto en el que tomaron parte 70 millones de militares. Su vida dio un vuelco para convertirse en un pacifista que se negaba a ir a los desfiles anuales y que «odiaba la guerra»
Nació en marzo de 1901 y a los14 años mintió sobre su edad para enrolarse en la Marina británica. En 1917 lo enviaron al acorazado HMS Revenge, buque insignia del Primer Escuadrón de Batalla, en el que fue testigo de la rendición de la Armada Imperial alemana. En 1926 fue destinado a Australia, durante la Segunda Guerra Mundial tenía la misión, como jefe de Demoliciones, de destruir puertos y suministros de combustibles si Japón invadía el país.