En enero del año pasado slió a la luz una grabación en la que se veía a varios soldados estadounidenses orinando sobre tumbs de afganos, conmocionando a la opinión pública. “Que tengas un buen día amigo”, dice uno de los hombres en el video, mientras que su compañero entre risas responde: “Dorado como una lluvia”. A los sargentos Joseph W. Chamblin y Edward W. Deptola, quienes serán juzgados por un tribunal militar, se les acusa también de no denunciar el incumplimiento de la disciplina por parte de sus subordinados, incluyendo el disparar indiscriminadamente.
Ya en marzo pasado un militar estadounidense mató a 17 civiles afganos sin razón aparente, un hecho que produjo malestar y disturbios en el país. El jefe del Pentágono, Leon Panetta, alertó a los soldados estadounidenses sobre el efecto negativo que producen los recientes escándalos vinculados con los militares norteamericanos, destacando que afectan seriamente a la reputación de EE. UU.
