No todos los genios son perfectos así que hoy te mostramos la historia de un hombre que hizo un gran descubrimiento para la humanidad pero que sacó su vena cruel cuándo le hicieron la competencia.
Resulta que Thomas Edison tras descubrir la energía eléctrica de corriente continua, conoció a Nikola Tesla en 1884, quién pensaba que la corriente alterna eléctrica de alto voltaje era mejor e inició sus trabajos en un motor de corriente alterna, viendo esto, Edison le ofreció un gran capital en el caso de que mejorara a sus propios generadores de corriente continua, pero cuando Tesla lo consiguió Edison no cumplió el trato y sólo se rió de él.
Pero Edison no se imaginó que George Westinghouse compraría las patentes de Tesla y llegaría a ser una gran potencia después de la alimentación de corriente alterna y su uso generalizado.
Edison y su orgullo se ocuparon de iniciar una campaña de publicidad contra la alimentación de Corriente Alterna para dar a conocer que era muy peligrosa con la electrocución de perros, vacas, gatos, caballos y demás animales.
El punto de inflexión llegó cuando Edison aseguró que el podía garantizar la ejecución humana de manera confiable, razón por la que tiempo después se contrato a alguno de sus empleados para crear la primera silla eléctrica, con la que la ejecución de la primer criminal fue un poco desastrosa, ya que tuvieron que esperar 8 minutos entre una carga u otra para poder llegar a ejecutarlo.
