Curtis Woodhouse es un ex futbolista que decidió colgar sus botas y dedicarse al boxeo profesional.
El deportista de 32 años de edad recibió críticas a través de Twitter después de perder un combate en el que se jugaba la corona del peso «Welter».
Un tweet en el que un usuario lo llamaba «desgracia» le calo tan hondo que el boxeador decidió ir a su casa para hacerle una visita poco amistosa.
Ofreció 1.000 libras en Twitter a quien le diera la dirección de «Jimmiob88″ que es Nick del autor del tweet que tan mal le sentó.
Finalmente consiguió la calle en la que vivía y se dispuso a realizar el viaje que lo llevara hasta el, en todo momento mantenía a sus seguidores informados de su viaje; «De camino a Sheffield para tener una pequeña charla con un viejo amigo, manténganse ahí»
La única pega es que Curtis no sabía el numero de la casa, «Bueno Jimbob, estoy aquí», escribió. «Que alguien me diga en qué número vive o tendré que llamar a cada puerta. #Es hora del show»
Ante la perspectiva de que el enfadado boxeador pudiese encontrar su casa, Jimmybob88 trató de calmar los ánimos de Woodhouse con un tweet conciliador: «Lo siento. Se me fue un poco de las manos y estaba en un error, lo acepto»
Aun así el boxeador amenazo con ir de puerta en puerta preguntando, pero al final dio marcha atrás y volvió a casa con este tweet; «Acabo de descubrir que se puede bloquear las personas. Podría haberlo sabido antes y me habría ahorrado 20 libras en gasolina».
