R. Budd Dwyer, un político estadounidense, se suicidó mientras concedía una conferencia de prensa televisada en vivo.
Dwyer desempeñó un cargo como miembro del parlamento de Pennsylvania, como republicano, desde 1965 hasta 1970, en el Senado del mismo estado de 1970 a 1980 y como tesorero estatal desde 1980 hasta su muerte.
A finales de 1986, fue acusado de haber aceptado un soborno de 300.000 dólares. El procurador de distrito de los Estados Unidos ofreció a Dwyer una oferta que implicaba una sentencia de un máximo de 5 años, a cambio de una petición por escrito de culpabilidad, dimisión, y cooperación en la investigación. Dwyer rechazó la oferta, y más tarde fue declarado culpable pero continuó profesando vehementemente su inocencia. Bajo la ley estatal, Dwyer seguiría sirviendo como tesorero oficial hasta su sentencia que posiblemente sería de 55 años en prisión y una multa de 300.000$.
El 22 de enero de 1987, un día antes de su sentencia, Dwyer convocó a una conferencia de prensa para «proporcionar una actualización sobre la situación.» Muchos esperaban que Dwyer anunciara su renuncia al cargo. En la conferencia, un agitado y nervioso Dwyer, declaró nuevamente su inocencia y afirmó que no renunciaría como tesorero estatal.
Finalmente Dwyer sacó un revólver 357 Magnum, aconsejando a los presentes: «Por favor, abandonen la habitación si esto los agravia». Mientras la concurrencia le gritaba a Dwyer, suplicándole que bajara el arma. Algunos trataron de acercársele. «Retrocedan, o esta cosa lastimará a alguien», advirtió. Tras esto, Budd se disparó y murió en el acto. Numerosas estaciones televisivas en toda Pennsylvania, transmitieron el suicidio de Dwyer en directo. Un portavoz de Dwyer, inmediatamente después del suicidio, insinuó que Dwyer pudo haberse inmolado a fin de retener la pensión estatal para su familia, la cual hubiera quedado en la ruina por los costes de la defensa legal o la multa.
Debido a este suceso por algún tiempo existió un sitio web llamado «The Budd Dwyer Suicide Fan Club» (hoy no existe), que regalaba camisetas a cualquier persona que enviara una foto de sí mismo con un arma en su cabeza.