Baldwin Street en Dunedin, Nueva Zelanda, ostenta el privilegio de ser la calle más empinada del mundo
Baldwin Street en Dunedin, Nueva Zelanda. Con una pendiente del 35%, ostenta el privilegio de ser la calle más empinada del mundo. Su desnivel es tan importante, que por cada 2,86 metros que se caminan horizontalmente, se asciende 1 metro.