Abuelas y nietos se conectan de una forma diferente
Abuelas y nietos se conectan de un modo mucho más intenso. Las mujeres se relacionan más con sus nietos que con sus propios hijos. Esta conexión fue estudiada y demostrada en forma científica. Solo quienes pudieron disfrutar de la presencia de sus abuelos durante su crecimiento, pueden dar fe de ello.
Los abuelos benefician el desarrollo de sus nietos
La presencia de los abuelos proporciona, tanto a niñas como niños, un desarrollo beneficioso. Desde la década de 1960 se realizaron muchos estudios al respecto. La conclusión fue que una de las razones es que las mujeres tienden a tener una vida más larga. Muchos años después de que concluye su ciclo reproductivo.
Esto provoca que puedan disponer de muchos años disfrutando de sus nietos. Lo que les brinda la posibilidad de participar en parte de su educación y crianza, demostrando la famosa “hipótesis de la abuela”.
Sin lugar a dudas, quienes dicen que los nietos son el mejor premio de la vida, no se equivocan. Y esto quedó demostrado en una investigación reciente que demuestra un mejor desempeño educativo de niños y niñas cuando cuentan con abuelos que se comprometen con ellos.
Confirman que la conexión entre abuelas y nietos es más intensa
El nuevo estudio concluye que las abuelas tienen mejores conexiones emocionales con sus nietos que con sus hijos o hijas. El estudio lo efectuó la Universidad Emory de Atlanta, Estados Unidos. Estuvo a cargo del antropólogo James Rilling, que con un equipo de colegas reclutó a 50 mujeres que eran abuelas. Debían tener al menos un nieto biológico con una edad entre los 3 y los 12 años.
El estudio consistió en el escaneo de sus cerebros con resonancia magnética. Mientras, se proyectaban imágenes de sus nietos, los padres de sus nietos y de adultos sin ningún vínculo con ellas. Según los investigadores, el experimento activó áreas del cerebro en las abuelas que se asocian a la empatía emocional.
Esto demuestra que una abuela tiene conexiones para sentir lo que sienten sus nietos mientras interactúan con ellos. Es decir, que si el niño o niña disfruta del momento, ella siente esa alegría en su propio ser.
Según el Dr Rilling, es evidencia de que existen receptores de cuidado parental en el cerebro. Las abuelas adquieren las emociones de esos receptores cuando están con sus nietos.
Lo más interesante del estudio es que el mismo se realizó también con los padres de los niños y con imágenes de ellos. La diferencia fue notable. En las abuelas las zonas de procesamiento de las emociones fue más fuerte que la de los padres.
Esta relación se asocia con la “hipótesis de la abuela”
En cambio, cuando las abuelas observaron las fotos de sus hijos o hijas, se activaron zonas diferentes del cerebro. Estas áreas cerebrales estaban más asociadas con lo cognitivo que con lo emocional. Esto demuestra que, con sus hijos se trata de comprensión cognitiva en lugar de las emociones que despiertan sus nietos. Es decir, que con la empatía emocional, las abuelas sienten lo que sus nietos sienten.
La “hipótesis de la abuela” expresa que las mujeres viven mucho más que cuando concluye su ciclo reproductivo para brindar beneficios evolutivos a sus hijos y nietos. Con el aumento de las expectativas de vida, son muchos más los niños y niñas que pueden disfrutar de sus abuelos. Y ellos cada vez más se comprometen en desempeñar un papel en los hogares de sus hijos.
Esto lo demuestra otro estudio realizado en la Universidad de Oxford en Inglaterra. Allí se demostró que los abuelos tienen una participación vital en el bienestar de sus nietos. Esto hace que los niños tengan menos problemas de comportamiento y emocionales.