A las personas superdotadas no siempre les va bien en la vida
Cuando eres pequeño a medida que creces varios mitos se van derrumbando, entre ellos el de que a los más inteligentes les va siempre mejor en la vida, ser superdotado no es sinónimo de éxito.
Fernando Marín era solo un niño de 9 años cuando ya decía cosas como; «Habría sido mejor que no hubiese nacido», «soy el pelele de la clase» o «yo lo único que quiero es una vida tranquila».
Cada mañana los nudos en la garganta y esa sensación en el estomago lo acompañaban al levantarse para ir al colegio, «Hablas mayor», le decían.
Su madre asustada por la situación acudió al psicopedagogo de su colegio, este le afirmo que el pequeño era superdotado y pasó de ser un niño problemático a ser un joven incapaz de adaptarse a su entorno por sentirse diferente.
Los tópicos dicen que las personas con un mayor coeficiente intelectual tienen pocas habilidades sociales y que se les da mal el deporte, aunque son solo eso, tópicos.