¿Y si hay diez planetas en el Sistema Solar?
En 2016 se conoció la posibilidad de que, en el Sistema Solar, hubiera un noveno planeta. Pero nuevas investigaciones sugieren que podría haber, incluso, un décimo.
El estudio, que será publicado en estos días en la revista Astrophysical Journal, describe como hicieron un seguimiento de las rocas espaciales del Cinturón de Kuiper, una región más allá de Neptuno que aúna varios objetos de entre 100 y 1.000 kilómetros. El movimiento de algunos de estos elementos sugiere que un planeta puede estar afectando sus órbitas.
«La explicación más probable de nuestro estudio es que hay una masa que interfiere y que no hemos podido ver aún», afirma Kat Vol, autora principal del estudio. El planeta tendría una masa similar a la de la Tierra o Marte, y su órbita estaría mucho más cerca de lo que se cree que está el noveno planeta, aunque estaría unas 60 veces más lejos del Sol que la Tierra -el noveno planeta se cree que está a una distancia de entre 500 y 700 veces la diferencia entre el Sol y la Tierra-.
La existencia del décimo planeta se basa en el estudio de 600 objetos del Cinturón de Kuiper. Algunos de ellos parecen tener una órbita «deformada», de unos ocho grados de desviación respecto a la órbita de los principales planetas del Sistema Solar.
Según los investigadores, la mejor forma de dar explicación a esta deformación es que haya otro planeta. Creen que el hipotético planeta nueve, de un tamaño 10 veces de la Tierra, no podría explicar esta anomalía. «El planeta nueve está demasiado lejos como para influir en el Cinturón de Kuiper», afirma la autora.
Los investigadores afirman que el hecho de que este planeta no haya sido detectado se explica en base a que podría estar ubicado en la parte central de la vía Láctea, que es muy densa. Desde nuestra ubicación, vemos que dicha región está llena de estrellas, lo que hace que sea muy difícil de detectar.
Se teoriza que podría haber muchos mundos ocultos en el borde del Sistema Solar. El noveno y el décimo planeta podría ser solo una parte de muchos planetas que aún no hayamos podido ver.