PowerGlove, un fracaso de Nintendo
Powerglove fue uno de los intentos de revolucionar el mundo de los videojuegos por parte de Nintendo. El aparato en cuestión era un guante en el cual estaba integrado el mando de la consola NES. El mando utilizaba el patrón del Wired Glove o Guante de Datos, un periférico de entrada que se desarrolló en la época para reconocer los movimientos de la mano-guante y ser simulados por un software dando así un paso adelante en la realidad virtual.
La idea en sí era atractiva y prometedora, pero en el año 1989, la tecnología de la que se disponía no permitía la fabricación de un sistema de ese estilo con un precio razonable. La diferencia entre el Wired Glove y el que fabricó Nintendo, es que el primero utilizaba sensores de fibra óptica con una resolución de 256 posibilidades mientras que el Powerglove disponía de 8, y solamente podía detectar movimientos de balanceo, además de ser fabricado con carbón y polvo de plata.
Para ocultar las capacidades limitadas de las que disponía el guante, Nintendo creó un anuncio publicitario bastante impactante con el cual, el accesorio que se vendía, resultaba muchísimo más atractivo de lo que en realidad era. El artículo de la compañía Nintendo se convertiría en uno de los precursores de los controles de movimiento siendo uno de los primeros artilugios que consiguieron recrear movimientos humanos a tiempo real en una televisión.
Lamentablemente los juegos que fueron creados especialmente para este aparato se vendieron poco siendo así el Powerglove un fracaso comercial.