Ubicada en el 156 de Pentonville Road, Londres, Surya Ecological Club es la única discoteca ecológica del mundo. Un lugar donde la energía producida por las personas al bailar es aprovechada para generar la electricidad, con la que se ilumina el local y se alimentan los equipos de sonido. La pista de baile está compuesta de baldosas de cristal que, al ritmo de las pisadas de los clientes, se mueven y generan cargas eléctricas que alimentan las baterías colocadas bajo el suelo. Según recoge la carta de presentación de este club londinense, con la energía cinética generada en la pista de baile se cubre el 60% de las necesidades de electricidad del club. El resto es completado con turbinas eólicas y paneles solares.
Esta curiosa discoteca, además de generar energía con las personas, cuenta con un sistema capaz de reciclar el agua empleada en los baños (reciclan el agua de lluvia para los inodoros). Por si fuera poco, ofrece licores orgánicos que son servidos en copas de policarbonato. Y claro, los vidrios y plásticos usados en el recinto también se reciclan.
La entrada cuesta 12 euros, una parte de este dinero va a parar a la ONG “Amigos de la Tierra”, organización dedicada a defender nuestro planeta. Pero si vas a pie, en bicicleta, o en transporte público la entrada es gratuita. De esta forma fomentan el llevar una vida más sana haciendo ejercicio y dejando en casa el auto que tanto contamina.
Surya Ecological Club pertenece al multimillonario Andrew Charalambous, presidente de Club4Climate, una organización contra el cambio climático; además se ha comprometido con diferentes causas relacionadas con la naturaleza. “Con los beneficios que sacamos de la música y la noche, destinados a Amigos de la Tierra, todo lo que tienes que hacer para salvar el mundo es bailar”, asegura Adrew.
Así pues Surya Ecological Club es una discoteca ecológica que ilumina mentes y crea conciencia, al asociar las ideas verdes con un estímulo tan positivo como bailar o beber un trago con los amigos.
