Los perros son animales domésticos, que viven con el hombre, pero necesitan salir a la calle para hacer sus necesidades. Los animales orinan para marcar el territorio y para comunicarse con sus compañeros a través del aroma.
La orina presenta un olor único que distingue a los animales, de forma que si un perro se acerca a un árbol y huele la orina de otro perro, entenderá que se trata de un territorio ajeno. También se diferencia el olor de la orina de un macho y una hembra, por lo cual otro perro sabrá si en ese lugar ha estado un perro o una perra. En la orina se detectan proteínas, hormonas y feromonas, mediante la que el perro puede averiguar si por allí ha pasado una hembra en celo. De hecho, algunos animales marcan a su hembra con orina para que otros perros sepan que ya tiene dueño.
De esta forma, no orinan por necesidad, para vaciar la vejiga, sino para marcar territorio. En caso de que sea por necesidad, lo hará en cualquier lado y tardará al menos 24 segundos.
