Las plantas que curan están en peligro de extinción
Las plantas que curan tienen estrecha relación con la farmacología desde los anales de la historia. Los laboratorios medicinales se nutren en gran medida del mundo forestal para la elaboración de diversos remedios. También hay hierbas que por sí mismas son de uso medicinal. Son muchas las especies de plantas y hongos que crecen en las selvas tropicales que son fundamentales para la salud. Muchas de ellas están en peligro de extinción.
Hay plantas que curan y hongos que están en peligro de extinción
Gran parte de estas plantas y hongos están en peligro de extinción debido a la tala indiscriminada y a la deforestación. Los países con más selvas como Etiopía, Brasil, India o Estados Unidos, cada vez consumen más bosques para la agricultura o lugares para habitar.
Según el Real Jardín Botánico de Kew, del Reino Unido, hay más de 700 plantas medicinales que están en peligro de desaparecer. Un informe que la entidad realiza cada año sobre el estado de plantas y hongos en 42 países, muestra ese declive.
Algunas especies muy importantes que pueden desaparecer
Una de las más comprometidas es el Kosso, un árbol de Etiopía del que se extrae de sus hojas, corteza y raíz un medicamento para la disentería. Teniendo en cuenta que muchos países no tienen acceso al agua potable, este medicamento es esencial para la salud de esas poblaciones.
En quimioterapia es fundamental el paclitaxel, que se extrae del Tejo del Pacífico. Se puede encontrar desde el sur de Alaska hasta el centro de California. Pero cada vez se reduce más su número. Del mundo de los hongos se sacan los medicamentos para tratar el colesterol.
Se buscan soluciones para no perder plantas que son importantes para la salud mundial
De la totalidad de plantas que se utilizan para medicamentos, solo un millar de ellas se cultivan en especial. El resto se extrae de las selvas tropicales. Su cultivo demoraría demasiado tiempo, el mismo que tarda un árbol en crecer. Hasta el momento no se encuentra la forma de reducir esos tiempos.
La mayoría de las plantas para la salud, no son fáciles de reproducir fuera del hábitat natural. Llevaría mucho tiempo desarrollar técnicas de cultivo y fertilizantes para cada una de ellas. Una de las soluciones sería proteger determinadas áreas donde estas plantas y hongos se encuentran. Aunque es muy difícil crear conciencia en países en los que la tala y la deforestación son cosa habitual.
Causas que provocan este problema
Los esfuerzos de la ciencia para salvar la mayor parte de las especies no es tan rápida como la deforestación. Si a esta realidad se le suman los incendios forestales, muchas de las plantas para la salud y hongos medicinales desaparecerán indefectiblemente.
El implacable cambio climático no es un factor favorable, que genera sequías y altas temperaturas. De las 5500 plantas que se utilizan en la industria bioquímica, más de 700 están en serio peligro, sin tener un reemplazo válido a mediano plazo.
En muchos lugares las plantas que curan son recolectadas por un sector informal de la población, como sucede en la India. Los escasos ingresos per cápita hacen que quienes recogen las plantas del mundo natural, se las vendan a los comercios por poco valor.
También, la escasez de regulaciones gubernamentales que protejan las plantas para la salud alienta la extinción de plantas que son esenciales para curar. El cuidado de la salud de las poblaciones del mundo también depende de tomar conciencia de este problema.