Marabú argala: mujeres Indias quieren salvarlo
Según una tradición popular, muy difundida en el mundo, las cigüeñas son portadoras de buenas nuevas, puesto que son las encargadas de llevar los nuevos bebés a las familias. Sin embargo, algunas especies de estas aves no son bien aceptadas y están en serio peligro de extinción. Es el caso del marabú argala, una de las cigüeñas más grandes e imponentes del mundo. Pero un grupo de mujeres de India trabaja para salvar la especie.
El marabú argala puede desaparecer
Solía habitar en los humedales de Camboya, India y Pakistán. Sin embargo, en la actualidad es muy raro verlas en su hábitat natural. Se calcula que solo quedan unas mil parejas en total, según lo indican datos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).
El marabú argala pertenece a la familia de las cigüeñas. Es un ave imponente por su tamaño. En promedio, mide 1,5 metros de altura y sus alas tienen una envergadura de 2,5 metros. En los poblados prefieren que no aniden cerca de las casas, porque tienen hábitos carroñeros, feo aspecto y excrementos malolientes. Además falsas creencias los rotulan como portadores de malos presagios. Por todas estas causas es que la gente destruye sus nidos.
Mujeres indias quieren salvar la especie
Un grupo de mujeres de la India, lideradas por la zoóloga Purnima Devi Barman, tratan de salvar la especie de su inexorable extinción. Se autodenominan el “ejército argala”.
Brindando espectáculos de danza, además de vender sus artesanías tejidas y compartir su música, recaudan fondos para ayudar a salvar la especie. A su vez, estas mujeres tratan de cambiar la imagen que tienen los pobladores, del marabú.
Calculan que el 80% de la población existente, habita en un gran relleno sanitario que rodea el humedal Deepor Beel. Las aves restantes se reparten entre Camboya y otros estados de India.
Un nacimiento que alimenta la esperanza
Los especialistas del Zoológico de Assam celebraron en el 2020 el nacimiento de dos crías de la especie. El hecho ocurrió por primera vez en la historia.
Para ello, construyeron nidos de bambú en dos plataformas a tres metros de altura y con un diámetro de un metro, imitando la forma particular con que los marabúes argala hacen sus nidos en la naturaleza. Plantaron allí los huevos fecundados y nacieron las dos crías con diez días de diferencia entre ambas. El hecho fomenta nuevas esperanzas para que otros conservadores en el mundo hagan lo mismo.
Este zoo de India y también un grupo de mujeres del mismo país, se comprometieron a intentar salvar al ave que los lugareños conocen como harguilla. La esperanza existe pero queda mucho trabajo por realizar.