Los dragones de nubes con aliento de fuego
Nubes incendiarias
Los incendios arrasan los bosques del oeste de Estados Unidos. Y se suma otro problema. Es una singular formación de nubes sobre el cielo. Les preocupa mucho a bomberos y los científicos. Son las nubes llamadas científicamente pirocumulonimbos o «nubes de fuego». Producen tornados y relámpagos que, a su vez, generan más incendios. La NASA los llama “los dragones de nubes con aliento de fuego”.
Tormenta de fuego
Se mueven rápidamente. Son tan poderosas que pueden crear sus propios sistemas meteorológicos. Tormentas eléctricas prácticamente imposibles de combatir. En ciertas condiciones en la tierra y la atmósfera, los incendios descontrolados pueden arrasar amplias áreas. Su energía acaba generando un pirocumulonimbo.
Comúnmente, los incendios descontrolados están alimentados por el viento. Pero una llamarada masiva puede contener tanto poder que el humo que genera no se despliega hacia los lados. En cambio, forma una columna o pluma. Puede ascender hasta 15 km hacia el cielo. Si alcanza la estratósfera se puede condensar y formar nubes.
Los pirocumulonimbos tienden a formarse en horas de la tarde. El viernes pasado, el Parque Nacional del Valle de la Muerte, en California, registró 54,4ºC. Encima de los incendios, los pirocumulonimbos pueden hacer que las llamas se extiendan. Incluso generan sus propios relámpagos. En algunos casos, también pueden generar lluvia. Si la temperatura baja a medida que llega la noche, hay otro peligro.
«Al final de la tarde, esa nube se desplomará. Creará una corriente descendiente de humo espeso y brasas. Sí, puede crear más incendios», dice Lisa Cox. Es jefe de información sobre los incendios del oeste de California. Puede provocar chispas a kilómetros de distancia del incendio principal.
Fuego que crece
«Este puede ser el más extremo que jamás haya visto», escribió Daniel Swain. Es científico del clima. «Literalmente una tormenta de fuego. Miles de relámpagos y con seguridad innumerables incendios nuevos». Algo que los equipos de bomberos no pueden combatir directamente.
Hay un promedio de 25 nubes de fuego en el oeste de Norteamérica cada año. «En algunas áreas bien publicitadas, la actividad incendiaria parece tal vez estar volviéndose más extrema», dicen los expertos. El cambio climático es una de las causas.
Los dragones de nubes con aliento de fuego aumentaron en décadas recientes. Y no es poco probable que se retiren a descansar muy pronto. Solo esperamos que nunca mires al cielo un día… y veas ese dragón en llamas.