La floración del bambú henon ocurre cada 120 años
La sabia naturaleza muchas veces desconcierta a los científicos. Es el caso de algunos animales y vegetales, que tienen ciclos poco comunes de reproducción. Como ocurre con la floración del bambú henon, que se da después de 120 años de espera. Además, florece por única vez para después morir. Esta floración, que está a punto de suceder, ayudará a los investigadores a estudiar el ciclo reproductivo de la planta para conocer más sobre su misteriosa regeneración.
La floración del bambú henon se produce cada 120 años
La especie conocida como bambú henon, cuyo nombre científico es Phyllostachys nigra var. henonis, es endémica de China. Sin embargo, el país donde más se cultiva es Japón, que lo siembran desde el siglo IX.
Lo que convierte a esta especie de bambú en una planta realmente rara es su ciclo de floración, ya que se produce cada 120 años. Después de esta floración, la planta muere. La última floración ocurrió en 1908, aunque posteriormente se produjeron pequeñas floraciones entre 1903 y 1912. Cumpliendo con este ciclo, estiman que la próxima floración masiva ocurrirá en 2028.
Temen que la planta no se pueda regenerar después de la floración
En Japón, existe una creciente inquietud en torno a la situación de los bosques de bambú, que abarcan aproximadamente 1,700 kilómetros cuadrados y desempeñan un papel crucial en la economía local.
La incertidumbre prevalece debido a la peculiar naturaleza de esta planta, que tarda más de un siglo en florecer y, aún más preocupante, es que, no todas las flores de bambú henon producen semillas. Esto plantea desafíos significativos para la regeneración de la planta, además de que temen por el riesgo de su desaparición.
Científicos de la Universidad de Hiroshima investigaron el misterio que rodea al bambú, centrándose en ejemplares que florecieron inusualmente temprano. Sus investigaciones revelan que muchas de estas flores carecen de semillas y que, lamentablemente, no se desarrollan nuevos tallos a partir del sistema radicular de la planta después de la floración. Los resultados de este estudio se publicaron en la revista PLOS One.
El líder de esta investigación, Toshihiro Yamada, señaló que “el bambú no produjo ninguna semilla viable capaz de germinar”, y destacó que la generación de nuevos brotes de bambú se detuvieron por completo tras la floración. Además, durante al menos los tres últimos años, no se observaron signos de regeneración de la planta.
La conclusión de este estudio plantea una seria preocupación acerca de la supervivencia del bambú henon en Japón. Parece improbable que la planta pueda regenerarse de manera efectiva después de la floración, lo que aumenta el temor de que los bosques de bambú puedan transformarse en extensas praderas, lo que a su vez tendría consecuencias significativas para la región.
La floración del bambú henon puede perjudicar la economía de Japón y también su ecología
Según explica Yamada, existe una posibilidad de que la planta se regenere bajo tierra. Sin embargo, este proceso puede tardar muchos años, teniendo en cuenta las características del bambú.
Las consecuencias pueden ser económicas y ambientales. Esta especie cubre una vasta zona de terreno, por lo que se puede producir modificaciones en el ecosistema. Asimismo, existen en Japón, industrias que utilizan el bambú como materia prima, que podrían estar seriamente perjudicadas.
Además, la planta es de vital importancia para preservar el suelo de la erosión y prevenir los deslizamientos de tierra. Como también mantiene en óptimas condiciones la cubierta vegetal en la zona donde se desarrolla.