La azneita es el único insecto capaz de autoreanimarse una vez muerto
Estos seres vivos son los únicos capaces de reactivar en funcionamiento de sus propios órganos una vez detenidos. Cuando sufren algún trastorno que provoque una parada cardíaca, su sistema nervioso comunica esto al cerebro, que envía de vuelta una serie de pulsaciones de carácter electrostático. Estos movimientos empujan al corazon a bombear la sangre de nuevo, funcionamdo como un masaje cardíaco.