La extinción del devónico
Según se cuenta por ahí, el planeta tuvo cinco extinciones que borraron la vida de la faz de la tierra. Una de ellas, precisamente la segunda, se volvió a repetir 15 millones de años después. Fue la extinción del devónico.
Cada extinción tuvo sus particularidades. Sin embargo, la más reconocida por sus consecuencias fue la del Cretácico Terciario. Es el período en que se extinguieron los dinosaurios.
La extinción del devónico, fue la segunda cronológicamente hablando, y ocurrió hace aproximadamente 370 millones de años. Aunque en esta ocasión, la catástrofe se volvió a repetir 15 millones de años más tarde. Del período solo algunos quedan restos fósiles.
El planeta era muy diferente a como se ve hoy
El origen del término Devónico se originó por un sedimento rojizo que se formó al chocar Europa con América del Norte. El estudio sedimentario comenzó en Devon, Inglaterra.
El primer evento del devónico se llamó Kellwasser y el siguiente Hangenberg. El planeta era totalmente diferente, pues el supercontinente denominado Gondwana se iba inclinando gradualmente hacia el norte.
Es este período comenzó la formación de otro supercontinente, al que se llamó Laurasia o Euroamérica. Estaba conformado por la unión o choque de lo que hoy es Europa del Norte, América del Norte, Rusia y Groenlandia.
Características del devónico
Este período en la vida de la Tierra, también se le conoce como la Edad de los Peces. Los supercontinentes carecían de vida, solo en el agua y en las costas, crecían plantas y había algunos animales.
Los Océanos del período Devónico en cambio, estaban llenos de vida, tanto las algas como los peces llevaban millones de años proliferando. También había microorganismos que eran más antiguos aún. También se podía encontrar arrecifes gigantes. En ellos vivían corales que eran solitarios y multitud de esponjas.
Los tiburones o sus antepasados, los cartilaginosos y los placodermos, reinaban en los mares. Recientemente, en la porción del Ártico que pertenece a Canadá, fue hallado un fósil con cabeza parecida a la de un cocodrilo denominado Tiktaalik.
Las aletas del ejemplar encontrado eran fuertes y con espinas, por lo que se deduce que las utilizaba en aguas de poca profundidad, e incluso en tierra firme. Tiene dos orificios en el extremo del hocico que indican que los utilizaba para respirar aire.
La naturaleza comienza a forestar el continente
Cuando el período se acercaba a su mitad, aparecieron en la tierra los primeros bosques, y los primeros peces con pulmones. Comienza a forestarse el centro del continente con las primeras plantas que podían producir leña. Las raíces empezaron a alargarse y podían superar el metro de profundidad.
Surgen los primeros cuadrúpedos con dedos en sus patas. De ellos no hay restos fósiles, solo se tienen huellas. Estas huellas cuentan que estos animales pasaban gran parte de su tiempo en el agua.
Para finales del período no se sabe a ciencia cierta que es lo que sucedió. Se cree que el hielo y la falta de oxígeno acabaron con cerca del 90% de la vida en los mares y en la tierra.