En la Cop26 fijan los objetivos para frenar el cambio climático
Entre el 31 de octubre y el 12 de noviembre se llevará a cabo la COP26 en Glasgow, Escocia. Es la Conferencia de las Partes (COP), órgano perteneciente a la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.
¿Desde cuándo se celebra la COP26?
En el año 1995 se realizó la primera de estas conferencias en la ciudad de Berlín. En ese momento, los miembros estaban de acuerdo en reducir las emisiones contaminantes. Por ese motivo, se acordó hacer una reunión anual para tener un mejor control sobre lo acordado.
Sin embargo, esta será la número 26 y no se han visto muchos cambios durante los últimos 25 años. Según los ambientalistas, con Greta Thunberg a la cabeza, se pueden realizar muchas reuniones, pero nada cambiará en el mundo.
Los expertos en clima también coinciden en que los avances han sido muy pobres. La decisión de los temas acordados son lentas y burocráticas. Se afirma que la más importante de las reuniones fue la del Acuerdo de París, la conferencia número 21.
Después de 20 años de reuniones prácticamente sin resultados positivos, al Tratado firmado en París lo adoptaron 196 países. Uno de los objetivos era poner un límite al aumento de la temperatura mundial por debajo de los 2° C.
La COP y el Tratado de París tienen objetivos coincidentes
El Tratado de París significa un antes y un después en la toma de acciones concretas. Algunas de estas acciones se traducen en los menores costes de las energías ecológicas. También se tomaron medidas para limitar el consumo de petróleo y sus derivados en industrias, transporte y automóviles. Lo mismo sucede con el carbón, que se está desechando su uso en usinas y la industria.
El principal objetivo de la COP26, junto con el Tratado de París, es limitar el dióxido de carbono o CO2. Compuesto por un átomo de carbono y dos de oxígeno, este gas incoloro es causante del efecto invernadero en la tierra.
Nuestro Planeta sufre las consecuencias del cambio climático
Es el efecto invernadero el culpable del calentamiento global y del consecuente cambio climático. Inundaciones, incendios, derretimiento de los polos, son solo algunas de las consecuencias.
Según el experto y politólogo sueco Charles Parker, de la Universidad de Uppsala, la tarea no es fácil. Se debe sustituir los combustibles fósiles por energías limpias de huella de carbono. El mayor problema radica en los intereses creados y los grupos económicos a los que solo les interesa ganar dinero. Estos grupos presionan para que nada cambie en el planeta.
Sin embargo, sobre los objetivos planteados en 2015 en París, se mejoró notablemente. Si bien todavía no lo suficiente, el camino es el correcto. Todavía no se consiguió el objetivo de estar por debajo de los 1,5° C.
Uno de los puntos más discutidos por los expertos y ambientalistas, es que no se sanciona a los países que no alcanzaron los objetivos. La presión social parece que es la única alternativa para que sus gobiernos cumplan con lo comprometido.
Aunque, lamentablemente, no en todos los países del mundo hay la libertad como para hacerlo. Hace falta que todos comprendan que la Tierra es una sola, que es el hogar del hombre y que solo aunando voluntades se puede frenar el apocalipsis climático.