El eucalipto arcoiris, único en el reino vegetal
Eucalyptus deglupta también es conocido como el eucalipto arcoiris por el aspecto particular de su corteza, una obra de arte creada por la naturaleza. Originario de Filipinas, Indonesia y Papúa Nueva Guinea, este enorme y particular árbol es único en el reino vegetal, ya que no existe otra especie arbórea que tenga una variedad de colores tan amplia en su corteza.
El secreto de su gran gamma de colores radica en cómo ocurre el cambio de su fina corteza a medida que el árbol va creciendo; una corteza que se caracteriza por ser la más fina de todos los eucaliptos, con tan solo 3 mm de espesor. Cuando la corteza de este eucalipto muda, en diferentes momentos y de manera irregular a lo largo del año, se desprenden «parches» del exterior de la corteza quedando expuesta una capa nueva y fresca de corteza verde.
Ésta corteza expuesta irá envejeciendo lentamente, y a medida que esto ocurre primero cambiará de verde brillante a un verde más oscuro, que luego se volverá azulado tendiendo a morado, pasando por el rosa y el naranja.
Por último, el color se convertirá en un marrón parduzco justo antes de que ocurra la nueva exfoliación. Debido a que este proceso está ocurriendo en diferentes zonas del tronco y en diferentes etapas al mismo tiempo, los colores son variados y están constantemente cambiando. Como resultado, el árbol nunca tendrá el mismo patrón de color dos veces, lo que lo convierte en una obra de arte viviente.