El censo de mariposas
Cada año se realiza en el Reino Unido
Cada verano en el Reino Unido, los amantes de la naturaleza se embarcan en una emocionante aventura: el censo de mariposas, también conocido como el Big Butterfly Count. Esta iniciativa tiene como objetivo contribuir a la conservación de estos bellos insectos y a la protección del medio ambiente. Una tarea científica en la que todos, sin importar su género o edad, pueden participar y aportar su granito de arena.
Miles de voluntarios identifican y cuentan los ejemplares con el censo de mariposas
En 2022 participaron de este evento más de 64 mil personas, que se dedicaron a contar las mariposas e identificar las especies existentes. Una labor innovadora que nació allá por 2010 y fue creciendo cada verano hasta convertirse en el censo de mariposas más grande de la Tierra.
El censo de mariposas se lleva a cabo con voluntarios, cuya tarea consiste en tomar fotografías de las mariposas avistadas y enviarlas a una aplicación en sus teléfonos móviles.
A su vez, científicos y especialistas en estos insectos recaban la información y la cotejan en un banco de datos sobre las especies conocidas. Como parte de los avistamientos recibidos, existe un mapa en un portal de Internet que registra los lugares donde se produjeron los avistamientos.
El conteo de 2023 comenzó el 14 de julio y finaliza el 6 de agosto. Quienes aman la naturaleza pueden participar de esta inspirada tarea. Los más aventureros, paseando por parques o reservas naturales, y los menos avezados, desde su propio jardín.
Las mariposas son importantes para la naturaleza
Los insectos, como las mariposas, abejas, escarabajos y avispas, desempeñan un papel fundamental en la naturaleza como agentes polinizadores, lo que los convierte en esenciales para la supervivencia de los ecosistemas en los que se encuentran. Además, su presencia agrega una hermosa estampa a los paisajes. Sin embargo, es preocupante que entre 1976 y 2019 hayan perdido un 42% del territorio en el que solían habitar. Esta disminución de su hábitat plantea serias consecuencias para su población y la biodiversidad en general.
Las mariposas tuvieron su origen en América del Norte y Central hace aproximadamente 100 millones de años. Un estudio reciente publicado en la revista Nature Ecology and Evolution reveló que su origen proviene de un grupo de polillas que cambió su ciclo de vuelo nocturno al diurno.
En el pasado, se sostenía la creencia de que las mariposas evolucionaron como resultado de una presión ecológica. No obstante, los investigadores han hecho nuevos descubrimientos mediante análisis de ADN que indican que su origen está vinculado al cambio de rutina de las polillas mencionadas en el párrafo anterior.
Gracias a un estudio reciente, los científicos sugieren que el frijol fue la planta huésped que promovió la evolución de las mariposas. Según investigadores del Museo de Historia Natural de Florida, Estados Unidos, este salto evolutivo se puede rastrear en el árbol troncal de alrededor de 2000 especies, incluyendo todas las mariposas y polillas conocidas.
En todo el mundo, se debería realizar un censo de mariposas debido a la belleza de estos pintorescos insectos alados. Este esfuerzo no solo implica reconectar con la naturaleza, sino también fomentar la participación de más personas en la conservación de nuestro planeta.