Cómo aprendieron los cuervos a fabricar ganchos
Rastreando los orígenes
Era un misterio. La ciencia estudió la rara habilidad de una población de cuervos en Nueva Caledonia. Fabrican un tipo único de herramienta en el mundo animal. Se trata de una especie de gancho. Pero, ¿cómo aprendieron los cuervos a fabrican ganchos? Parte de la respuesta tiene que ver con la genética.
Únicos en su tipo
Hacen sus propias herramientas de palo con puntas en forma de gancho. ¿Y para qué las usan? Para atrapar presas invertebradas en pequeños agujeros y grietas. Es el único animal no humano conocido que fabrica este tipo de accesorios.
«Pusieron mucho esfuerzo en hacerlos. Usan plantas específicas con tallos bifurcados. Los procesan en herramientas en forma de gancho para buscar alimento». Lo dice en un comunicado la coautora del estudio, la doctora Linda Neaves. «Pero eliminan las hojas y gran parte de la corteza. Es imposible identificar rápidamente las especies de plantas».
Habías tres sitios de estudio a largo plazo. En uno de ellos, se supo que la materia prima era un arbusto introducido. En el otro, era una variedad de especies. Ya en el tercero no había respuesta, era muy difícil determinarlo.
Finalmente, pidieron ayuda al profesor Peter Hollingsworth. Pertenece al Royal Botanic Garden en Edimburgo, Escocia. Preguntaron si el ADN podría usarse para determinar qué planta era». Así llegó la respuesta. Coincidía con el ADN de un gran árbol nativo, Mimusops elengi.
Parte del misterio resuelto
«Es nativa. Pudo ser la planta original usada para hacer herramientas. El equipo de campo lo confirmó más tarde. Y es que los cuervos en cautiverio temporal lo hacían con esta planta», explicó Steele.
«Claramente, estos cuervos se han adaptado. Pueden hacer uso de especies de plantas introducidas. Pero es emocionante descubrir que esta población prefiere un árbol nativo. Esto plantea muchas preguntas interesantes. ¿Cómo y por qué los cuervos seleccionan las plantas que usan? ¿Cómo esto puede verse influenciado por cambios en su entorno?».
Hay mucho aún por estudiar para saber cómo aprendieron los cuervos a fabricar ganchos. Pero una de las claves ya fue descubierta.