Australia salva peces de la extinción
Los refugia en acuarios
Son veinticinco peces mano rojos. Los trasladaron a un acuario en un esfuerzo de rescate. Quieren protegerlos contra las altas temperaturas atmosféricas y del mar previstas para este verano. Así Australia salva peces de la extinción.
«El hogar del pez mano rojo (del que apenas quedan cien ejemplares) se enfrenta a una grave pérdida y degradación de su hábitat. Es por un aumento en la abundancia de erizos nativos que han pastoreado demasiado su hábitat». Lo dijo en un comunicado el Instituto de Estudios Marinos y Antárticos (IMAS) de la Universidad de Tasmania.
Reubicando peces
La ola de calor es una amenaza grave y significativa para la existencia de la especie. «La degradación del hábitat significa una pérdida de refugios y microhábitats. Es cada vez más difícil para el pez mano adaptarse al estrés de la temperatura del agua», dijeron.
El Dr. Andrew Trotter dirige el proyecto de cría para la conservación del pez mano rojo. Propuso reubicar una proporción de la población en cautiverio. Así puede reducir el riesgo asociado con las altas temperaturas del mar previstas. Australia salva peces de la extinción gracias a esto.
«Esta estrategia no está exenta de riesgos. La reubicación de los peces mano del mar a los acuarios fue bastante fluida y se adaptaron muy bien a sus nuevos hogares. Este verano ya ha superado con creces los máximos de temperatura anteriores. Está experimentando temperaturas elevadas sin precedentes. Este factor de estrés adicional afectará a la ya frágil población», afirmaron.
Nombre particular
Este pez mano recibe su nombre de su preferencia por «caminar» sobre sus aletas pectorales y pélvicas. Esto se debe a que no tienen vejiga natatoria como otros peces. Para ellos mantenerse a flote y nadar es un desafío.
El pez mano rojo Thymichthys politus es una pequeña especie en peligro crítico de extinción. Mide unos 8 cm de largo y varía en color desde el rojo brillante hasta el rosa claro o el marrón. Se estima que quedan menos de 100 individuos en estado salvaje. Viven en dos pequeños parches de arrecife rocoso en la bahía Frederick Henry, al sureste de Hobart.