Chad Koczera, ingeniero aeroespacial de Connecticut y de 30 años de edad, capturó con su dron una nueva isla que baña las aguas de Carolina del Norte, en Estados Unidos. Es una franja de tierra que roza la costa, y aparentemente salió de la nada.
«Mi novia y yo estuvimos allí con el coche para recoger conchas hasta que vimos un área en que ya no podíamos avanzar más», afirma Chad a IFLScience. «Puse en marcha el dron hasta que descubrí esta isla».
Las fotos de la isla fueron tomadas el 24 de mayo. Se cree que apareció en abril, y que desde entonces ha ido creciendo; la han llamado «Shelly Island» (Isla de las Conchas), por la gran cantidad de caparazones que se pueden encontrar en su arena.
Parece ser que no es tan extraño que emerja una masa de tierra de estas características. Esto se debe a que en la zona golpea la corriente del Golfo, y las aguas turbulentas y tormentas pueden estar causando cambios drásticos, erosionando las playas y creando nuevos sedimentos. Lo que sí que es extraño, sin embargo, es que la nueva isla sea de un tamaño tan grande.
Hay una poderos corriente que corre entre el cabo y la isla, lo que hace que no sea de fácil acceso. Además, aunque pueda parecer idílica, no lo es tanto: no solo hay conchas, sino que también está llena de huesos de ballena y anzuelos.
Las autoridades locales han desaconsejado el acceso a la isla o tratar de nada hacia ella, debido a las fuertes corrientes y por la presencia de tiburones.
No está claro por cuánto tiempo estará la isla, sobre todo con las condiciones cambiantes de la zona.
