Según un estudio realizado por investigadores del Hospital Vall d’Hebrón, en Barcelona y las universidades de Valencia, Navarra y Burdeos, la culpable de la enfermedad del Parkinson es una proteína.
La proteína que se encuentra en las personas que han fallecido a causa del avance de la enfermedad, provoca que la enfermedad avance y aumente el riesgo de muerte. La proteína, llamada “a-sinucleína”, está en el cerebro de los pacientes que sufren Parkinson.
En el estudio se decidió aplicar esta hormona en los cerebros de ratones y monos. Cuatro meses después de la inyección en ratones y nueve meses después de la inyección en monos, los animales presentaban síntomas propios de la terrible enfermedad del Parkinson.
Este descubrimiento publicado en la revista «Annals of Neurology», da lugar a la posibilidad de que se descubran nuevos tratamientos para detener o evitar la aparición de la enfermedad.
