La historia de Tutankamon siempre ha estado envuelta de misterio desde que su momia fue descubierta el año 1992, casi intacta y recubierta por una máscara y una tumba de oro, y sobre todo tras un total de veinte muertes misteriosas de los que se atrevieron a ‘molestar’ al difunto, cosa que le dota una gran popularidad siendo uno de los faraones más recordados de la historia.
Se creía que Tutankamon, que reinó en Egipto durante un periodo en la primera mitad del siglo XIV a.C., había fallecido víctima de la malaria, pero su último capítulo ha dado un giro inesperado. Según muestra su cadáver momificado, el famoso emperador murió a causa del atropello de un carruaje en pleno combate. Además, se ha podido saber que se prendió fuego tras un intento un tanto chapucero por embalsamarlo.
Para llegar a dicha conclusión, el investigador Chris Naunton analizó los apuntes de Howard Carter, descubridor de la momia, junto con diversos forenses del Instituto Forense de Cranfield llevando a cabo una autopsia virtual del cadáver utilizando la tecnología del escáner con tomografía axial computarizada.
Este anuncio ha causado bastante impacto ya que los últimos días de vida del faraón no constaban en ningún registro. Estos datos se presentaron en un programa especial de tipo documental en una famosa televisión británica, así como por qué la tumba estuvo tantos años sin ser descubierta.
