Los extraños hombres de cabeza grande
Un equipo de científicos asegura haber hallado un nuevo grupo de antiguos humanos en Asia Oriental. Sus cerebros eran significativamente más grandes que los de sus contemporáneos, e incluso los nuestros. Este hallazgo indica que la historia humana en Asia es más extensa de lo que se pensaba. Los extraños hombres de cabeza grande son la confirmación de esto.
El estudio lo dirigió el paleoantropólogo Xiujie Wu y el antropólogo Christopher Bae. Presenta un nuevo y fascinante grupo de humanos antiguos, denominados Juluren (Homo juluensis). Se cree coexistieron con el Homo sapiens en Asia Oriental hace más de 100.000 años.
Provocador
Se creía que algunos hallazgos atribuidos a los Juluren pertenecían a los denisovanos, un antiguo grupo humano estrechamente emparentado con los neandertales. Pero ciertos fósiles hallados en China poseen características que no son de humanos modernos, neandertales ni denisovanos.
Los hallazgos presentan un mosaico de rasgos indicativos de una ascendencia mixta. Son varios grupos de homínidos que habitaron la región hace entre 300.000 y 50.000 años. Ponen de relieve una complejidad hasta ahora infravalorada en el registro fósil humano del este de Asia.
John Hawks, antropólogo que comentó el estudio, calificó el trabajo de «provocador». Señaló que el registro humano en Asia es más diverso de lo que muchos especialistas han supuesto. Destacó la importancia de distinguir los diferentes grupos en lugar de agrupar todos los fósiles de Homo erectus u Homo sapiens. Los extraños hombres de cabeza grande
Revisando la Historia
Los Juluren muestran características dentales que recuerdan a los neandertales. Pero también poseen rasgos únicos que no se encuentran en otros homínidos conocidos. En particular, sus cerebros son notablemente más grandes que cualquier otro homínido de su época, incluidos los humanos modernos. Los fósiles de homínidos de Asia Oriental presentan una mayor variación morfológica de la que se había reconocido hasta ahora. Un ejemplo notable citado por Wu y Bae es un fósil descubierto recientemente en Hualongdong. Este no encaja en ninguna de las categorías establecidas, lo que ilustra aún más la complejidad de la evolución humana.
«En todo caso el registro de Asia Oriental nos está impulsando a reconocer lo compleja que es la evolución humana en términos más generales. Y nos obliga realmente a revisar y replantear nuestras interpretaciones de los modelos evolutivos», resumen los científicos. El estudio fue publicado en Nature Communications.