Según una investigación del Instituto Vanderbilt para la Energía y el Medio Ambiente de Tennessee, lavarse las manos con agua caliente no es nada beneficioso para nuestra salud, no elimina los gérmenes y bacterias, y además producen daño al medio ambiente, ya que se emite un mayor nivel de CO2.
Los investigadores del estudio aseguran que el calor puede matar las bacterias dependiendo de la temperatura, si es superior a 45ºC el efecto es contraproducente. El agua fría a 4ºC, por el contrario, es efectiva para eliminar los agentes patógenos al frotar las manos, si se enjuagan y se secan correctamente.
Además, se ha descubierto que además de que el agua caliente no mata las bacterias, también tiene un efecto adverso en la higiene, ya que irrita la piel y afecta a la capa protectora que nos expone con mayor riesgo al exterior. El estudio se realizó a partir de las conclusiones extraídas de una encuesta en la que el 64% de las veces que una persona se lava las manos lo hace con agua caliente.
