Las reacciones al miedo se generan en nuestro cerebro
Frente a una situación de peligro, los seres humanos solemos reaccionar con una crispación en la piel. Se siente como si el corazón se nos fuese a salir por la garganta. Aunque todas estas reacciones al miedo, se deben a un proceso que se lleva a cabo en nuestro cerebro.
Las reacciones al miedo son cambios en nuestro cuerpo provocados por el cerebro
El cerebro comanda los cambios que provoca el temor en el cuerpo. Es una forma de supervivencia. Las áreas de la mente que interactúan cuando sentimos terror, son varias y suceden en tan solo una infinitesimal fracción de segundo.
Un estudio electrofisiológico que realizó el Centro de Salud Mental de la Universidad de Texas, dio como resultado importantes datos. Una veintena de personas fueron sometidas a ver más de 200 imágenes en forma aleatoria. Algunos de los elementos de la reproducción mostraban situaciones reales de peligro. Otras eran irreales.
Durante el avance del estudio, los participantes se sometieron a un electroencefalograma. Mientras se sucedían las imágenes debían apretar un botón u otro. Si la imagen era real tenían que presionar un botón con el dedo índice. Frente a una imagen irreal debían presionar otro botón con el dedo medio.
Los resultados obtenidos ayudan a mejorar los posibles tratamientos
El resultado del estudio reveló que las imágenes que representan peligro producen un aumento en ondas theta en el lóbulo occipital. Esta área de nuestro cerebro es la encargada de procesar la información visual. Al mismo tiempo, aumentaron las ondas theta en el lóbulo frontal, donde se produce el planeamiento y la toma de decisiones.
A la vez, se produjo un incremento en las ondas beta que están relacionadas con las acciones motoras. De estas reacciones del cerebro, los científicos determinan que ante el peligro, la actividad comienza en la parte posterior del músculo.
En esta posición se encuentra el centro que controla las emociones, llamado la amígdala. Tiene interacción con el hipocampo, que es donde está almacenada la memoria. Pasa luego a la zona del nuestro cerebro que procesa el pensamiento. Al mismo tiempo que las ondas beta pone en alerta brazos y piernas. Esto funciona para cuando hay que escapar del peligro o defendernos en caso de un ataque.
Buscando una explicación más sencilla, se puede decir que nuestro cerebro nos pone en alerta ante una situación de amenaza o de peligro. Lo que ocurre en el cerebro y a la vez en el cuerpo es ir adaptando la respuesta fisiológica, de comportamiento y de pensamiento.
Ayudar a las personas a superar miedos y fobias es lo más importante
Hasta no hace mucho tiempo, se creía que el miedo se procesaba en la zona emocional de nuestro cerebro, la amígdala. No obstante que esto sea cierto, además de la amígdala, como se dijo, intervienen otras áreas cerebrales que contribuyen para adaptarnos a la emoción.
De todas formas, de las reacciones al miedo se puede deducir que existen muchas personas que sienten diferentes fobias o estrés postraumático. Como también son variadas las respuestas a esos temores. Estudios como este, permiten mejorar los tratamientos para esas personas. Por medio, de la mayor compresión y claridad de lo que sucede en el cerebro y por eso es que se continúa investigando.